Seguidores

viernes, 25 de julio de 2014

Federico II


En cierta ocasión, el rey Federico II el Grande, de Prusia, cayó enfermo. Pero el monarca no era muy afecto ni a los doctores ni a las medicinas de la época, tanto que su doctor Hans Zimmermann tenía perseguirle para se las tomara o aceptara algún tratamiento.  Zimmermann le preguntó alguna vez al rey la razón de su evasiva tanto al médico como al tratamiento. El rey le miró y le preguntó: “Decirme, sinceramente, ¿la muerte de cuantos lleva en su conciencia?”. Zimmermann contestó: “Unas trescientos mil menos que usted, Majestad”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario