El 17 de marzo de 1938, en un
tren que se dirigía a Siberia, nace el bailarín ruso Rodolfo Nureyev. Su madre
se dirigía junto con Rosa, Leilia y Rezida, hermanas del bailarín, a encontrarse
con su marido Jamet que servía en el Ejército Rojo. Allí, vivieron en una zona
rural de los Urales en un cuartucho de 16m2 que compartían con otras familias.
Pese a su situación tan precaria, el 31 de diciembre de 1944 su madre pudo
llevar a sus hijos al Teatro de Furá a ver la actuación del ballet que allí
actuaba. Desde ese momento Nureyev se propuso ser bailarín pese a la negativa
de su padre, que a golpes intentaba quitarle esa idea. La única opción que
tenia en ese momento era ingresar en un grupo de danzas regionales; para cuando
tenía 15 años recibió sus primeras clases de ballet clásico de Ana Udaltsova,
que le instó a irse a Leningrado (hoy
San Petersburgo) para buscar una mejor escuela, cosa imposible por el momento
dada la situación de su familia. Sin embargo, dos años después un grupo de
danzas bashkirias viajo por la ciudad, yendo con ella el director del ballet Kirov, Konstantin
Sergeyev, que se fijó en él y de inmediato le ofreció una beca. Allí aprendió
de Alexander Pushkin, acogiéndolo éste en su casa. La esposa de Pushkin, Xenia,
se obsesionó con Nureyev y lo hizo su amante.
Tiempo después Nureyev aceptó su
homosexualidad, pero eso no lo detuvo a
tener amantes femeninas, pero sí le generó que la KGB le tuviera en la
mira, aunque eso no impidió que viajara a París en la primera gira del Kirov a
Occidente. París se rindió al genio ruso. Durante su estancia en la ciudad luz
se enamoró de un bailarín occidental e intimó con Clara Saint, nuera del
escritor André Malraux, a la sazón ministro de Cultura francés. Fue la misma
Saint la que ayudó a evadir a la KGB en el aeropuerto de Le Bourget y así poder
ir a una estación de policía a pedir asilo político. Fue condenado en ausencia a siete años de prisión
por alta traición. En París fue contratado por el marqués de Cuevas como
bailarín principal del Royal Ballet, conociendo meses después a la que sería su
pareja de baile por quince años: Margot Fonteyn. Durante ese tiempo sostuvo un
romance accidentado con el bailarín danés Eric Bruhn.
Conocido por su exigencia consigo
y con los demás, también lo era por sus potentes saltos, sensibilidad e
imaginación en las coreografías, llegando a protagonizar varias películas. Nureyev fue nombrado en 1983 director del
Ballet e la Ópera de París, cargo que dejó de forma abrupta por su negativa a
dejar los Estados Unidos por estar
representando el musical El rey y Yo. En 1987, durante la era Gorbachov, se le
permitió visitar a su madre enferma y que moriría al año siguiente. En 1992
recibió la distinción de Caballero de la Orden de las artes y Letras en el
Palacio Garnier de París, siendo ésta su ultima aparición pública, y donde se
le vio sumamente demacrado y necesitando ayuda para poder caminar.
Muere en 1993 según su médico a
consecuencia de una complicación cardiaca, debido a una penosa enfermedad; esa
enfermedad fue el sida; tenía 54 cuando. Nunca olvidó a Rusia, siendo
rehabilitado en aquel país de forma póstuma en 1998.