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martes, 25 de agosto de 2015

Duelos



Durante el siglo XVII en Francia se vivió una fiebre por los duelos pese a estar prohibidos. Alejandro Dumas retrata parte de ellos en su novela “Los tres mosqueteros”, pero más allá de la visión romántica que se tiene sobre éstos es interesante saber cómo y por qué se daban. Existían muchos tipos de duelos, uno de ellos era lo que se conocía como encuentro accidental y se efectuaba sin preparación alguna. Sin embargo generalmente se ceñían a una serie de códigos o normas. Uno de ellos era el desafío, esto era cuando se ofendía la honra. El ofendido retaba al ofensor a un duelo de distintas formas, tales como de palabra, con una bofetada, por escrito o carteles.
El lugar de combate era normalmente a las afueras de la ciudad y a resguardo de las autoridades. Por lo regular,  los duelistas combatían en camisa dejando el torso desnudo; se prohibía el uso de armaduras, se podía combatir a pie o a caballo, sin armas de fuego ya que contradecía la valentía propia del duelo. 

La espada era el arma favorita, en especial la “rapière” o espada ropera que pese a ser más mortífera no causaba mutilaciones ni desfiguraba el rostro. En ocasiones se medían las espadas para verificar que tuvieran la misma medida, pero la mayoría de las veces se lanzaban al combate sin más. También se podía usar una daga que se usaba para desviar las estocadas o cortes. Los duelistas podían llevar a un testigo o padrino que no solo observaba el combate sino que también se enfrentaba a su contraparte y si triunfaba primero podía acudir a ayudar al duelista que acompañaba. No todos los combates terminaban en muertes ya que se podía llegar a una reconciliación antes del duelo, también se podía terminar cuando se hería ligeramente al rival, esos se conocían como “a la primera de sangre”. A veces eran farsas para salvar la honra, otras a las dos estocadas se daban por bien servidos y terminaban el combate, pero muchos otros terminaban en la muerte de uno de los contrincantes, conocido éste como “la última de sangre”.

Según un cronista francés, del centenar de duelos que registró, un tercio se resolvió antes del combate, un tercio no fueron mortales y el resto terminó con la muerte de algunos de los duelistas. Algunos historiadores calculan que entre 1589 y 1610 entre cuatro mil y cinco mil duelistas perdieron la vida.


Sin embargo, los retos se prestaban para que duelistas se convirtieran en verdaderos criminales, como un tal caballero D’ Andrieu que a sus 30 años había matado a 72 hombres en duelos, muriendo é ejecutado por la justicia Real. Luis XIV, el rey solo, promulgó edictos que fueron prohibiendo los duelos, decayendo paulatinamente. El ultimo registrado en Francia fue en 1892, donde un capitán judío y un antisemita se enfrentaron, muriendo el primero pero convirtiéndose en un héroe ante la opinión pública.  

lunes, 29 de junio de 2015

Palacio de las Tullerías


Josefina Napoleón tenía la costumbre de sentarse en la misma banca cuando paseaba por los jardines del palacio de las Tullerías. En cierta ocasión se pintaron los asientos y Napoleón ordenó que un soldado se apostara exactamente en el banco que solía escoger Josefina para que no se manchara de pintura fresca. Medio siglo después, Eugenia de Montijo, la esposa del emperador Napoleón III, sobrino de Napoleón, observó que cada día se cambiaba al soldado que resguardaba la banca, todo esto porque no se había derogado la orden desde la época del Gran Corso. Baste decir que un poco después la orden fue derogada por Napoleón III.

miércoles, 24 de junio de 2015

José Bonaparte


José Bonaparte, hermano mayor de Napoleón, nació en 1768 en Córcega. Cuando  la familia se trasladó a Provenza en 1790, José comenzó a realizar misiones para el gobierno republicano. En 1794 se casó con Julia Clary en Marsella, quien le dio dos hijas, Zenaida (1801) y Carlota (1802). Estaba en París como diputado cuando su hermano se proclamó Emperador y al no tener descendencia Napoleón la línea sucesoria recaía en José. Las sesiones de Bayona (1808) es uno de los hechos históricos más vergonzosos  de España donde Carlos IV y su hijo Fernando VII abdican, para conservar su vida, a favor de José Bonaparte. En mayo de 1808 es coronado rey de España, jurando la Constitución en julio de ese mismo año. Durante su gobierno suprimió todo tipo de derechos feudales, las órdenes religiosas y el Consejo de Castilla (centro del poder después del rey), el Santo Oficio, realizó reformas urbanísticas en Madrid y regularizó la deuda pública.


Sin embargo, pese a sus buenas obras y de avanzada para el país, nunca dejó de ser un usurpador para los españoles, quienes lo llamaban peyorativamente “Pepe botella” pese a ser prácticamente abstemio. Cuando la llamada “guerra de independencia” española avanzaba, le obligó a abandonar el trono en 1813.  Después de la abdicación de Napoleón se trasladó a Nueva York con el título de conde Surville, pasando en 1832 a Inglaterra para finalmente recibir del duque de Toscana permiso para radicar en Florencia, donde murió en 1844.

martes, 23 de junio de 2015

Sudoku


El sudoku tiene sus antecedentes en los cuadros mágicos chinos, árabes y los que desarrolló el matemático suizo Leonhard Euler en 1783. Éste ideó tablas para realizar cálculos de probabilidades en las que cada número aparecía una vez por fila y columna, aunque no tenían las nueve casillas que el juego tiene. Como ejercicio lúdico, el sudoku nació en 1979 cuando apareció en revistas de pasatiempos. Sin embargo, fue en Japón donde adquirió su nombre: su (número) y doku (solitario) y su enorme popularidad. 

sábado, 20 de junio de 2015

Pocahontas


Pocahontas nació en 1595 con el nombre de Matoaka, se le apodó Pokahantesú, que significa “se divierte con cualquier cosa”. Hija preferida de Wahunsanocock jefe indio de los Powhatan, tribu asentada en lo que hoy es Virginia Y Maryland y que vivían de los cultivos de maíz y del tabaco, así como de la caza, la pesca y la recolección. En 1607 los Powhatan alteraron su vida con la llegada a la bahía de Chesapeake de los colonos ingleses, quienes fundaron Jamestown.  Esta colonia de inicio sufrió porque la escasez, las epidemias y el hambre (al ser una zona pantanosa) hacían que dependieran de los indios y de los envíos de Londres.

De inicio la relación entre los colonos y los Powhatan era de beneficio mutuo ya que los primeros recibieron terrenos sin derecho a propiedad y como usufructo temporal, y los segundos obtenían hachas, metal y cuchillos. Sin embargo los colonos se incrementaron y exigieron tierras “por derecho de descubrimiento” porque querían zonas al interior.

Cuando los ingleses llegaron Pocahontas tenía 12 años, y su relación con los colonos se conocen por las fuentes inglesas que dicen que visitaba constantemente la colonia, siendo una de esas visitas donde se construyó la leyenda con el capitán John Smith.

Capturado por un jefe menor Powhatan cuando se dirigía a una expedición que buscaba comida, fue conducido a la capital de la tribu y cuando lo iban a ejecutar, Pocahontas se interpuso y según palabras de Smith “se adelantó y puso su cabeza sobre la mía para salvarme”. Es aquí donde entra la leyenda, ya que para muchos estudiosos esta historia proviene de la imaginación de Smith; otros sugieren que el capitán entendió como una ejecución lo que en realidad era un ritual de “adopción” por parte de los Powhatan para convertirlo en vasallo. Ésta última versión tiene lógica ya que a los Powhatan la amistad de Smith les servía para sostener buenas relaciones con la colonia y evitar un conflicto que era poco favorable para ellos debido a que el armamento inglés era más letal. Sin embargo las relaciones se tensaron y después de varios conflictos un tanto menores estalló la guerra en 1611.

Pocahontas fue víctima de este conflicto ya que en 1613 fue capturada a traición por Samuel Argall mientras visitaba una tribu aliada. Fue llevada a Jamestown para ser usada como moneda de cambio por prisioneros ingleses. Su estancia fue bastante buena ya que no solo perfeccionó su inglés, también se convirtió al cristianismo y se bautizó con el nombre de Rebeca, llegándose a casar con John Rolfe el 5 de abril de 1614, hecho que permitió rebajar las tensiones entre los bandos y firmar la paz.

Para 1616 Pocahontas ya era madre de un niño llamado Thomas y viajó junto con su esposo a Inglaterra para ser presentada a la corte y mostrar el éxito de la colonización, ésta que mostraba como una “salvaje” podía convertirse al cristianismo y hasta casarse con un inglés. Durante su estancia se reencontró con Smith, suceso que a muchos ha hecho suponer que hubo un romance entre ambos, cosa muy improbable.

Pocahontas murió en marzo de 1617 víctima posiblemente de viruela, disentería o tuberculosis, cuando preparaban el regreso a Virginia. Su hijo fue educado en Inglaterra y en 1640 regresó a América donde se hizo de una gran fortuna. Su pueblo libró dos guerras más contra los ingleses en 1621-23 y 1644-46 donde prácticamente fueron acabados.